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General Motors ha iniciado un retiro masivo de aproximadamente 600.000 vehículos de sus marcas Cadillac, Chevrolet y GMC en Estados Unidos, tras identificar posibles defectos en el motor que podrían comprometer la seguridad en carretera. La medida afecta a modelos seleccionados fabricados entre 2021 y 2024, entre ellos el Cadillac Escalade, Chevrolet Silverado y GMC Sierra. De acuerdo con documentos de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA), los vehículos involucrados comparten un mismo tipo de motor que, presuntamente, podría presentar fallos estructurales en componentes clave como la biela o el cigüeñal.

El principal riesgo identificado es una eventual falla del motor mientras el vehículo está en marcha, lo que podría incrementar la probabilidad de accidentes. Algunos conductores podrían experimentar advertencias previas, como sonidos anormales, disminución del rendimiento o la activación de la luz de verificación del motor. Ante esta situación, GM ha indicado que los concesionarios inspeccionarán los autos potencialmente afectados y realizarán las reparaciones necesarias sin costo alguno para los propietarios.

Este retiro representa un reto operativo y reputacional para General Motors, que deberá coordinar una respuesta eficiente con sus redes de servicio para minimizar el impacto en sus clientes. Aunque se estima que solo una fracción de los vehículos presenta el defecto, la empresa enfrenta el desafío de gestionar tanto el proceso técnico como la comunicación con los usuarios. Según anunció GM, las notificaciones oficiales a los propietarios comenzarán a enviarse a partir del 9 de junio de 2025.

Publicado por: Editor Minuto30

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