
Nuevos documentos judiciales han arrojado luz sobre un caso que ha conmocionado a la nación, revelando detalles impactantes sobre la muerte de Arely Naomi Proctor, una niña de tres años que perdió la vida en medio de un exorcismo llevado a cabo por su propia familia. Los informes indican que la pequeña luchó durante interminables 20 horas mientras su madre, su tío y su abuelo intentaban expulsar un supuesto «demonio» de su cuerpo en el altar de la Iglesia Apóstoles y Profetas, en el centro de San José, California.
Pastor, Family Members To Face Trial in Child’s Alleged Exorcism Death: Police in San Jose, California, have made more arrests in last September’s alleged exorcism death of 3-year-old Arely Naomi Proctor. In addition to the victim’s mother, who was… https://t.co/r5xM9ZWpfU pic.twitter.com/LFeU49hgrx
— Tweets for Thinkers (@thinkertweet) June 14, 2022
El vídeo, publicado en YouTube meses después del trágico suceso, muestra a la madre de Arely aparentemente disfrutando del protagonismo, lo que ha generado indignación pública. Según informes la niña expresaba amor hacia su madre, incluso mientras sufría tortura en el exorcismo. Según los documentos judiciales, Arely dijo «Te amo» a su progenitora mientras los perpetradores la sujetaban por la fuerza y la sometían a maltratos.
JUST IN: New court documents claim that three-year-old Arely Naomi Proctor tried escaping while her family performed an exorcism on her that killed her.
They should all face the death penalty.
Arely was found dead on the church altar after she fought for 20 hours as her… pic.twitter.com/UOWgSv1qfQ
— Collin Rugg (@CollinRugg) April 9, 2024
Rebekah Wise, la fiscal adjunta del distrito, describió el horrendo asalto que sufrió la pequeña, señalando que ella luchó desesperadamente por su vida mientras los agresores la agarraban por el cuello y la sometían a una serie de abusos. La madre de Arely, presuntamente, llegó a introducirle los dedos en la garganta y la sostuvo en una posición que le dificultaba respirar. Después de vomitar, los agresores arrojaron a la niña al suelo, donde finalmente dejó de respirar.
Claudia Hernández, Hernández Santos y René Trigueros Hernández, los acusados en este caso, han declarado su inocencia. Sin embargo, la justicia aún está por determinar si existen pruebas suficientes para enjuiciarlos.