Este viernes, finalmente comenzó el esperado proceso de demolición del edificio de la escuela secundaria Marjorie Stoneman Douglas en Parkland, Florida, escenario de la trágica masacre de 2018 donde perdieron la vida 17 personas. Esta demolición ha sido recibida con un «alivio indescriptible» por parte de las familias de las víctimas y los estudiantes afectados, quienes ven en este acto un paso crucial hacia la sanación.
Yelitza Martínez, madre de Alejandra, una de las estudiantes que vivió horas de angustia durante el tiroteo, compartió con la agencia de noticias Efe: «Se habían tardado demasiado. Ese edificio se ve desde la autopista. Pasar por ahí era un suplicio».
Después de seis años de ser preservado por razones legales, fue derrumbando este viernes el edifico donde ocurrió la masacre de la escuela secundaria Marjorie Stoneman Douglas manos de Nikolas Cruz, un exalumno, donde murieron 17 personas en 2018. #Parkland #Masacre pic.twitter.com/8OEc9EyOdE
— elavisomagazine (@elavisomagazine) June 15, 2024
Para Tony Montalto, presidente de Stand with Parkland y padre de una víctima, la demolición del edificio 1200 es un paso necesario para avanzar. «La demolición del edificio donde mi hija Gina y tantos otros perdieron la vida es una parte necesaria para seguir adelante», declaró. Reconoce que aunque este acto simbólico no borrará la tragedia, representa un avance significativo para la comunidad.
Say their names and never forget the lives lost that horrible day 6 years ago at Marjorie Stoneman Douglas.
My heart is with the families of the victims today and every day. pic.twitter.com/w7SMTHtRoB
— Gay Valimont for Congress (@gayforcongress) February 14, 2024
El edificio 1200 había permanecido en pie durante seis años debido a su relevancia en el juicio contra Nikolas Cruz, el autor confeso del crimen. Cruz fue condenado a cadena perpetua después de que el jurado no alcanzara unanimidad para la pena de muerte. Aunque las autoridades extendieron una invitación a las familias para presenciar la demolición desde un lugar especial, pocos aceptaron, informó la agencia de noticias. Esto subraya la intensidad emocional y la complejidad del proceso de sanación en curso para las familias afectadas.