En un escandaloso incidente que ha sacudido al mundo del entretenimiento, el comediante Jaime Caravaca estuvo sorprendido y agredido por el activista de derecha Alberto Pugilato. El altercado tuvo lugar después de que Caravaca hiciera presuntos comentarios de pederastia sobre el hijo de Pugilato, un bebé de apenas tres meses de edad.
El desafortunado episodio se desencadenó a raíz de un comentario de Caravaca en las redes sociales, donde respondía a una foto de Pugilato junto a su hijo. En sus palabras, el comediante insinuó de manera grotesca que el pequeño eventualmente podría volverse homosexual y desarrollar una preferencia por personas de raza negra.
El comentario de Jaime generó una oleada de repudio en línea, llevando a la plataforma donde se realizó la publicación a limitar su alcance, ya que se consideraba que violaba las normas de uso y convivencia de la comunidad. Sin embargo, la controversia no quedó relegada al ámbito virtual.
En un evento público, Alberto Pugilato irrumpió en el escenario donde se encontraba Jaime Caravaca y, visiblemente enfurecido, lo agredió físicamente. El incidente dejó a Caravaca con contusiones leves, pero ha avivado un intenso debate sobre los límites del humor y la responsabilidad en el discurso público.