ACTUALIZACIÓN: Liberan a seis de ocho ocupantes ilegales tras redada de armas y drogas

Seis de los ocho ocupantes ilegales detenidos en una redada de armas y drogas en nueva york han sido liberados sin derecho a fianza. El juez del tribunal penal del Bronx, Eugene D., también liberó al presunto pistolero bajo libertad supervisada. Bowen, a pesar de la solicitud de libertad bajo fianza del fiscal de distrito. El mismo juez liberó bajo su propia responsabilidad a otros dos ocupantes ilegales. Además, el juez del tribunal penal del Bronx, Laurence Busching, puso en libertad supervisada a tres personas más después de sus audiencias.

La decisión de liberar a estos individuos ha generado controversia en la comunidad y entre las autoridades. El fiscal de distrito había solicitado que se mantuviera a los acusados bajo custodia, argumentando la gravedad de los delitos y el riesgo de fuga. Sin embargo, los jueces optaron por la libertad supervisada, lo que ha desatado críticas sobre el sistema judicial y sus criterios para determinar la detención preventiva.

Judge Eugene D. Bowen is a fucking idiot.
These 6 will kill someone https://t.co/mAPMTSmWE4

— Stingerzz666 (@stingerzz666) April 3, 2024

 La redada se llevó a cabo en medio de esfuerzos continuos por parte de las autoridades para combatir el tráfico ilegal de armas y drogas en la ciudad. Con la liberación de la mayoría de los detenidos, las autoridades enfrentan el desafío adicional de garantizar la comparecencia de los acusados en el tribunal y prevenir la reincidencia en actividades delictivas. liberados

🚨NEW: NYPD arrests 8 SQUATTERS, including multiple illegals and a 7-year-old child after finding illegal guns and drugs

Police responded to a building on March 27 after reports of a man with a gun. They found two men with firearms inside

All but two were released without bail… pic.twitter.com/KJTBFlGHkr

— Unlimited L’s (@unlimited_ls) April 2, 2024

La liberación de los acusados ha avivado el debate sobre la aplicación de la ley y la justicia penal en Nueva York, destacando la necesidad de un enfoque equilibrado que proteja los derechos de los acusados sin comprometer la seguridad pública.