
En un estudio reciente del Centro de Investigaciones Pew, se reveló que el grupo más significativo en términos de creencias espirituales en Estados Unidos son los ‘nones’, individuos que no se identifican con ninguna afiliación religiosa. Este colectivo, denominado ‘nones’ en inglés, abarca a ateos, agnósticos y aquellos que declaran no tener una religión específica. Su crecimiento ha sido asombroso en las últimas décadas, pasando de representar solo el 5% de la población estadounidense hace 50 años al 28% en la actualidad.

Tomado de Pew Research Center
Diversidad en los “nones”
El estudio, titulado ‘Los nones en Estados Unidos: quiénes son y en qué creen‘, revela que este grupo ya supera en número a los protestantes evangélicos (24%) y a los católicos (23%). El 17% de los ‘nones’ son de origen latino, siendo el segundo grupo étnico más representado después de los blancos, que constituyen un 63%. Además, el 69% de los ‘nones’ son menores de 50 años, y la distribución de género es casi equitativa, con un 51% de hombres y un 47% de mujeres.
Dentro de los ‘nones’, el 17% se identifica como ateo, el 20% como agnóstico, y el restante 63% afirma no tener una religión en particular. Este último grupo, según el estudio, tiende a tener niveles educativos más bajos, posturas políticas más moderadas y una actitud menos negativa hacia la religión.

Tomado de Pew Research Center
Reflexiones sobre la religión y la ciencia
El estudio, que incluyó a más de 3,300 adultos estadounidenses, concluyó que los ‘nones’ no constituyen un grupo homogéneo. Aunque el 68% de ellos cree en Dios o en algún poder superior, la mayoría no participa en servicios religiosos y el 67% alberga dudas o escepticismo, cuestionando alrededor del 60% de las enseñanzas religiosas.
La visión de los ‘nones’ sobre la religión es crítica, considerándola potencialmente dañina. A pesar de tener una perspectiva más positiva hacia la ciencia que aquellos con afiliaciones religiosas, rechazan la idea de que la ciencia puede explicarlo todo.
Implicaciones políticas y cívicas
El aumento de los ‘nones’ plantea cuestionamientos sobre su impacto en la vida pública estadounidense, según Gregory Smith, el investigador líder del estudio. Smith sugiere que los ‘nones’ se concentran en distritos electorales liberales y demócratas, lo que podría alterar el equilibrio político en las próximas décadas, contrarrestando el declive de evangélicos blancos, quienes predominantemente respaldan políticas conservadoras.
Aunque el estudio señala que los ‘nones’ podrían ser un grupo político influyente, destaca que están menos comprometidos cívicamente y menos propensos a votar en comparación con los religiosos. Se sugiere que se necesitaría un esfuerzo organizativo similar al de las iglesias para aprovechar completamente su potencial político. El estudio revela que dentro de los ‘nones’, los ateos y agnósticos tienen más probabilidades de participar en acciones políticas y cívicas en comparación con aquellos que simplemente declaran no tener una religión específica.
El crecimiento explosivo de los ‘nones’ en Estados Unidos representa un cambio significativo en las creencias espirituales del país. Este grupo diverso y en constante evolución no solo desafía las etiquetas convencionales, sino que también podría desempeñar un papel crucial en la configuración del futuro político de la nación. Aunque su influencia potencial es evidente, se plantean desafíos en términos de compromiso cívico que podrían requerir estrategias organizativas efectivas para maximizar su impacto político.