En una noche que prometía diversión, cuatro jóvenes afroamericanos provenientes de Wausau, con edades entre 18 y 20 años, se dirigieron a Stevens Point con la intención de disfrutar en un club local. Sin embargo, su entrada fue denegada debido a su edad, al ser menores de 21 años. Desafortunadamente, lo que siguió fue un acto de violencia atroz. Donald G. Mitchell, un hombre sin hogar de 61 años que residía en su camioneta, fue brutalmente asesinado a golpes por estos individuos. Un video perturbador capturó el momento en que los agresores se burlaban de Mitchell mientras yacía en el suelo, agonizando, antes de saquear su vehículo.
Este trágico incidente, que ocurrió en plena vista del público, no recibió la atención mediática nacional que merecía. La razón detrás de este silencio es tristemente predecible en una sociedad que a menudo pasa por alto la violencia contra personas sin hogar.
Los nombres de los perpetradores parecen ser Christian Emerson, Arlin Sangster, Daemon Kitzrow y Brandon Boehm. Christian Emerson enfrenta cargos por poner en peligro imprudentemente la seguridad. Aunque se le impuso una fianza en efectivo de $50,000, ya ha sido liberado tras pagarla. Su comparecencia ante el tribunal está programada para el 3 de abril.
La situación legal de los otros tres jóvenes no está clara en este momento. Aunque fueron puestos en libertad bajo fianza, el destino de los cargos en su contra aún está por determinarse. Esta tragedia destaca la urgente necesidad de abordar la violencia en este caso contra el hombre sin hogar y garantizar que quienes cometen tales actos sean llevados ante la justicia de manera adecuada.