
El bicarbonato de sodio es uno de los métodos más efectivos y económicos para eliminar malos olores. Solo necesitas espolvorear una cucharada dentro de cada zapato y dejarlo actuar durante la noche. Este producto neutraliza el olor al absorber la humedad y las bacterias responsables del mal olor.
Bolsitas de té usadas: un truco poco conocido
Después de preparar una taza de té, no tires la bolsita. Déjala secar y colócala dentro del zapato. El té tiene propiedades antibacterianas y su aroma ayuda a refrescar el calzado. Úsalo especialmente con zapatos deportivos o cerrados que usas con frecuencia.
Vinagre blanco: desinfección profunda
Para una limpieza más profunda, mezcla una parte de vinagre blanco con una parte de agua, humedece un paño y limpia el interior del zapato. Luego déjalo secar completamente al sol. El vinagre es un desinfectante natural que mata hongos y bacterias, y además ayuda a neutralizar los olores de forma duradera.