
Una vida en la primera línea
En el árido paisaje fronterizo de Arizona, la vida del ranchero Ladd, de 68 años, está marcada por una realidad implacable. Con su Glock al lado, Ladd enfrenta una lucha constante en la frontera, donde 17 cuerpos han sido encontrados en sus 16,000 acres, una cifra desgarradora que revela la crudeza de la migración ilegal.
Desafíos cotidianos en la frontera
Durante más de tres décadas, Ladd ha sido testigo de la persistente marea de migrantes y los despiadados cárteles que dominan el territorio más allá de la frontera. En esta tierra agreste, donde los agentes de la Patrulla Fronteriza se enfrentan a un aumento del 200% en las detenciones, la realidad se vuelve aún más cruda para aquellos como Ladd, cuyos ancestros han criado ganado aquí durante 127 años.
NEW: Arizona rancher John Ladd has found 17 dead bodies on his land which spans 10.5 miles along the U.S. southern border.
Where are all of the crocodile tears from @AOC and the Democrats?
Unfortunately, it gets worse. Ladd has a «r*pe tree» on his property where ‘guides’… pic.twitter.com/0aHUUyMldv
— Collin Rugg (@CollinRugg) March 2, 2024
La amenaza incesante
Para Ladd y otros rancheros, la seguridad de sus tierras y familias es una prioridad constante. Con una mirada preocupada hacia el futuro, Ladd describe la escalada de la violencia y el riesgo que enfrenta a diario. Los intrusos, vestidos de camuflaje y determinados, se arrastran por su propiedad, evadiendo la detección y representando una amenaza latente.
Protección y legitimidad
En medio de esta crisis, los republicanos locales buscan brindar mayor protección legal a los terratenientes como Ladd. Un proyecto de ley propuesto busca ampliar las disposiciones legales que permiten el uso de la fuerza letal en defensa propia. Con esta medida, los propietarios de tierras tendrían derechos más sólidos para proteger sus hogares y familias de los intrusos.
Mientras tanto, la incertidumbre política y el cambio en el liderazgo han dejado a muchos como Ladd preocupados por el futuro. Con la llegada del presidente Biden, la situación en la frontera ha empeorado, dejando a comunidades enteras en una lucha por mantener su seguridad y forma de vida.