
La lectura es una actividad que, además de enriquecer la mente, puede reducir significativamente el estrés. Diversos estudios han demostrado que leer por al menos seis minutos al día disminuye la frecuencia cardíaca y relaja los músculos.
Sumergirse en una historia permite desconectar de las preocupaciones diarias, mejorar la concentración y promover el bienestar emocional. La lectura antes de dormir, en particular, favorece la relajación y la calidad del sueño.
Incorporar el hábito de la lectura en la rutina diaria es una forma sencilla y accesible de cuidar la salud mental y disfrutar de momentos de tranquilidad.