Las autoridades de Nueva Orleans han logrado recapturar a cuatro de los diez reclusos que se escaparon el pasado viernes del Centro de Justicia de Orleans, tras una fuga que ha dejado al descubierto serias falencias en la seguridad penitenciaria. Los internos, cuyas edades van de los 19 a los 42 años, escaparon tras abrir un agujero detrás de un inodoro y burlar varias vallas perimetrales. Los fugitivos enfrentan cargos graves, como asesinato y agresión con arma de fuego, lo que ha generado alarma pública y movilizado recursos de distintas agencias.
Se activa operativo conjunto con el FBI y la Policía Estatal
Como resultado directo de la fuga, se desplegó un operativo a gran escala que ha involucrado al FBI y a la Policía Estatal de Luisiana. Las recompensas por información que conduzca a los prófugos restantes fueron duplicadas, mientras crece la presión sobre la administración carcelaria. Las investigaciones apuntan a una posible colaboración interna, dado que la evasión no fue detectada sino hasta varias horas después. Hasta el momento, tres empleados han sido suspendidos, y se revisan a fondo los protocolos de vigilancia y control dentro del penal.
Persisten seis prófugos y la tensión en la comunidad
Pese a los avances, seis reclusos siguen prófugos, y aunque se sospecha que aún estarían en el área de Nueva Orleans, no se descarta que algunos hayan abandonado el estado. Este hecho ha generado gran preocupación, especialmente entre los familiares de las víctimas de los delitos atribuidos a los evadidos. Las autoridades trabajan con urgencia en su recaptura, al tiempo que se evalúan reformas estructurales y medidas inmediatas para fortalecer la seguridad del centro penitenciario y evitar que hechos de esta magnitud se repitan.