Un incidente curioso sacudió las calles de Montana cuando Vincent Zepeda, residente local, se vio envuelto en una situación inusual después de una simple compra de pizza. Lo que comenzó como una salida cotidiana para satisfacer un antojo culminó en un giro inesperado con un perro que dejó a Zepeda y a los transeúntes perplejos.
Zepeda, tras adquirir su pizza, se aproximó a su vehículo, listo para regresar a casa y disfrutar de su deliciosa cena. Sin embargo, lo que encontró en el asiento trasero de su auto lo dejó sin aliento: ¡un perro desconocido y relajado!. Resulta que Zepeda se había confundido de automóvil y se había subido a uno muy similar al suyo. La sorpresa de encontrarse con el canino en el asiento trasero fue monumental para Zepeda, quien admitió sentir un escalofrío de confusión y asombro ante la situación inusual.
El propietario del vehículo en cuestión había cometido el descuido de dejar las llaves dentro, lo que permitió que Zepeda arrancara el auto por error. Al reflexionar sobre el momento surrealista, Zepeda compartió: «Cuando miré por encima del hombro y vi la expresión de ese perro, fue surrealista porque también tengo un laboratorio inglés que se parece a ese».
Afortunadamente, el incidente concluyó sin mayores complicaciones. Zepeda pudo rectificar su error y devolver al perro a su dueño, quien seguramente se sorprendió al encontrar a un extraño junto a su mascota.