
Una investigadora de la Universidad de Harvard, identificada como Kseniia Petrova, fue detenida en el Aeropuerto Internacional Logan de Boston tras presuntamente no declarar muestras de embriones de rana al ingresar a Estados Unidos. Durante el interrogatorio, Petrova negó haber mentido a las autoridades o cometido perjurio, aclarando que no tenía la intención de infringir la ley. Sin embargo, como resultado del incidente, su visa de trabajo fue revocada por los agentes de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), lo que generó una situación legal compleja para la científica.
El arresto de la Dra. Petrova ha tenido una consecuencia directa sobre su investigación en el Laboratorio Kirschner de la Harvard Medical School, donde llevaba a cabo importantes proyectos científicos. Su detención no solo interrumpe su trabajo, sino que también ha generado preocupación en la comunidad académica sobre el impacto que estos incidentes pueden tener en la capacidad de las universidades estadounidenses para atraer y retener talento científico internacional de alto nivel, lo que podría afectar el desarrollo de innovaciones en diversas áreas.
El futuro de la Dra. Petrova sigue en duda, mientras los procedimientos legales continúan. Sus abogados argumentan que la omisión en la declaración de las muestras biológicas no debería haber llevado a la revocación de su visa y su detención por parte de las autoridades migratorias. Este caso resalta las complejidades de las regulaciones aduaneras y sus implicaciones para la comunidad científica global, mostrando los desafíos que enfrentan los investigadores internacionales al trabajar en Estados Unidos.