Un joven de 19 años, Hayden Bates-Vellmure, fue sentenciado a 30 años de prisión por su implicación en un tiroteo ocurrido el año pasado en Fort Worth, que dejó a seis personas heridas. Aunque Bates-Vellmure no disparó ninguna arma, presuntamente organizó el ataque, coordinando a otros cuatro individuos para llevar a cabo el tiroteo desde un vehículo. Las víctimas, con edades entre 3 y 19 años, fueron alcanzadas por las balas mientras se encontraban en una zona cercana al lugar del ataque.
De acuerdo con las versiones preliminares, cinco de las seis víctimas fueron hospitalizadas, siendo una de ellas reportada en estado crítico y otra en estado grave. Los investigadores consideran que el objetivo inicial del ataque podría haber sido un miembro de un grupo delictivo que residía en la misma área. A pesar de que el incidente dejó un saldo tan negativo, las autoridades lograron arrestar a cinco sospechosos en pocas semanas.
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Hasta el momento, tres de los cinco sospechosos han sido declarados culpables por su participación en el ataque. La sentencia de Bates-Vellmure representa un paso importante en el proceso judicial, mientras las autoridades continúan investigando los detalles del tiroteo y las posibles conexiones entre los involucrados.