En un incidente que ha generado controversia, una joven de 17 años con talento musical ha sido expulsada de su escuela secundaria cristiana en Carolina del Norte por actuar en bares y clubes nocturnos que sirven alcohol. Bailey Griggs, la estudiante afectada, afirma que su expulsión de la Academia Cristiana Cramerton en Gastonia se debe a su presencia en lugares donde hay «drogas y alcohol«, a pesar de que ella no consume estas sustancias. «Soy la intérprete y no bebo. Soy menor de edad», subrayó Griggs.
Bailey, que estaba a punto de comenzar su último año, expresó su sorpresa y decepción por la decisión de la escuela. «Siempre que terminábamos la escuela, tenía todo el derecho de pensar que iba a regresar», dijo. La notificación de su expulsión llegó a través de un correo electrónico enviado a su madre, quien también está indignada por lo ocurrido.
La madre de Bailey señaló una aparente doble moral en la decisión de la escuela, afirmando que otros estudiantes publican imágenes en redes sociales asistiendo a conciertos donde se sirve alcohol sin enfrentar consecuencias similares. «Los otros niños en las escuelas, hay publicaciones, muchas, muchas publicaciones de ellos asistiendo a conciertos de música», declaró.
Bailey insistió en que actuar en estos bares es parte esencial de su carrera musical y que siempre ha cumplido con las leyes al no consumir alcohol debido a su minoría de edad. Este incidente ha suscitado un debate sobre las políticas escolares y la justicia en la aplicación de sus reglas, así como sobre los derechos de los estudiantes que persiguen carreras en industrias donde el consumo de alcohol es común.