
Durante una reciente sesión pública en Nueva York, la fiscal general Letitia James fue interpelada por un ciudadano que cuestionó el uso de recursos públicos en el juicio contra el expresidente Donald Trump, el cual calificó como una “cacería de brujas”. El participante también mencionó la existencia de una investigación del FBI, sugiriendo que James debería disculparse con el estado y enfrentar consecuencias legales por un presunto fraude hipotecario. La intervención fue directa y se desarrolló en un ambiente de creciente tensión pública.
Este episodio ocurre en medio de una investigación federal que, según versiones preliminares, estaría explorando posibles irregularidades vinculadas a la oficina de la fiscal. Aunque aún no se han dado a conocer detalles oficiales del proceso, las preguntas formuladas durante el evento reflejan una percepción de malestar entre algunos sectores de la ciudadanía respecto a las acciones emprendidas por James en su cargo. El señalamiento sobre el supuesto fraude añade una dimensión sensible al escrutinio actual.
VIDEO:
NEW: New Yorker calls out AG Letitia James at a town hall after the FBI launched an investigation
“Will you apologize to President Trump and the state of NY for wasting millions of dollars for a witch trial and how does it feel to know that you will be in prison for mortgage… pic.twitter.com/7I7L5BTkAi
— Unlimited L’s (@unlimited_ls) May 9, 2025
Como consecuencia, la figura de la fiscal general podría enfrentar una disminución en su credibilidad institucional, tanto ante la opinión pública como dentro del sistema judicial estatal. La atención mediática que ha suscitado este intercambio refuerza el debate sobre la transparencia en el ejercicio del poder, y podría influir en la forma en que se desarrollen futuros procesos legales liderados por su oficina.