
Un grupo de manifestantes pro palestinos ha tomado el Hamilton Hall de la Universidad de Columbia en un acto de protesta contundente. Esta acción se produce pocas horas después de que la escuela comenzara a suspender a los estudiantes por participar en protestas similares. Los manifestantes han colgado una pancarta en el edificio que dice «Intifada«, que significa levantamiento en árabe. Según informes de CNN, alrededor de 200 personas han bloqueado las puertas del edificio, mientras que dentro del mismo se encuentran unas doce personas.
Columbia students have made history in their takeover of Hamilton Hall.
They’ve shown a generation that US and Israeli genocidal aggression won’t be taken sitting down, with echoes to the anti-war movement of the 1960s.
Dont. Stop.pic.twitter.com/V0SvWqDXuY
— Danny Haiphong (@SpiritofHo) April 30, 2024
Los funcionarios de Columbia han emitido un comunicado en el que aconsejan a los miembros de la comunidad evitar el campus principal debido a la protesta en curso. Esta medida busca garantizar la seguridad y el bienestar de todos los involucrados mientras se resuelve la situación.
La toma del Hamilton Hall es un indicio del creciente apoyo y solidaridad con la causa palestina en los campus universitarios de Estados Unidos. Este acto de protesta busca llamar la atención sobre la difícil situación en Palestina y mostrar solidaridad con el pueblo palestino en su lucha por la justicia y los derechos humanos.
NEW: Pro-Palestine protesters have seized Hamilton Hall at Columbia University and barricaded themselves inside.
The move came just hours after the school began suspending students over the protests.
The protesters draped a banner after taking over the building that read… pic.twitter.com/6kG4wq1K3v
— Collin Rugg (@CollinRugg) April 30, 2024
Se espera que las autoridades de la universidad y los manifestantes mantengan un diálogo abierto para encontrar una solución pacífica y resolver las demandas planteadas por los manifestantes. Mientras tanto, la situación en el campus de la Universidad de Columbia permanece tensa, con una presencia policial notable y una comunidad universitaria dividida ante esta controversia.