Un vuelo de American Airlines que se dirigía de Chicago a Manchester, New Hampshire, se vio obligado a realizar un aterrizaje de emergencia en Buffalo, Nueva York, después de que un pasajero ebrio se expusiera y orinara en el pasillo del avión. El hombre, identificado como Neil McCarthy de 25 años y residente de Oregon, estuvo arrestado por la policía de Buffalo tras el aterrizaje y acusado de exposición indecente. Según las autoridades, McCarthy había estado bebiendo alcohol durante el vuelo y se comportó de manera disruptiva antes de exponerse y orinar en el pasillo.
El incidente provocó molestias entre los demás pasajeros y obligó al piloto a desviar el vuelo hacia Buffalo para que McCarthy pudiera estar detenido. Los pasajeros del avión expresaron su disgusto y miedo por el comportamiento de McCarthy, lo que generó un ambiente de tensión y preocupación a bordo.
Tras el arresto, McCarthy admitió ante la policía haber consumido varias bebidas alcohólicas antes y durante el vuelo. También mencionó que sufre de un problema médico de micción que lo hace sentir «muy cansado» cuando necesita usar el baño. McCarthy enfrenta cargos por exposición indecente, un delito menor que conlleva una pena máxima de seis meses de prisión y una multa de $5,000.
Este incidente resalta la importancia de la seguridad aérea y la necesidad de que las aerolíneas implementen medidas más estrictas para evitar que pasajeros ebrios o bajo la influencia de sustancias alteradoras de la mente pongan en riesgo la seguridad de los demás pasajeros y la tripulación.