
La exrepresentante Tulsi Gabbard anunció que un grupo de inteligencia de EE. UU. está investigando los orígenes del COVID-19 con el apoyo de exfuncionarios de la administración Trump. Según Gabbard, el gobierno podría revelar pronto los resultados de esta investigación, lo que ha generado especulaciones globales.
La divulgación de estos hallazgos podría cambiar la percepción sobre el origen del virus y afectar relaciones internacionales, además de influir en futuras estrategias de prevención de pandemias.
Este anuncio se da en medio de un persistente debate internacional sobre las posibles causas del COVID-19, desde su propagación natural hasta incidentes en laboratorios.